Megapalo, la madre de todas las rutas

[drluisvargas]

Y también por ratos los carros debían descansar...

[drluisvargas]

La cara de felicidad de Vélez

[drluisvargas]

Los paisajes, la vegetación y uno que otro voladero le dan mucha variedad a la ruta, esa es la parte agradable.

[drluisvargas]

Ya a media ruta, imposible regresar, avanzábamos muy lento pero no había de otra, o sigues o sigues. ¡ Y es una ruta de poco más de dos kilómetros !

[drluisvargas]

Y nos cayó el chahuixtle ! Con la lluvia el camino se convirtió en arroyo, chorreaba agua de todos lados, hasta de los árboles

[drluisvargas]

Ni para guarecerse en ningún lado, los jeeps ladeados y sin puertas se mojaron por completo.

[drluisvargas]

El agua estaba fría y con el atardecer comenzó a bajar la temperatura. El jeep de Camacho todavía seguía detrás del mío. En una parte más ancha del camino me rebasó.

[drluisvargas]

La lluvia empeoró las cosas, pero nadie paró, continuamos el avance, claro que más lentos

[drluisvargas]

Para quitarse el frío Balín abrazaba el motor caliente del Cid

[drluisvargas]

Y comenzaba a atardecer...

[drluisvargas]

Con la noche, la lluvia y el frío, cero tracción, pero con mucha fortaleza, seguimos adelante, nadie pensó en dormir. Tres campesinos de la zona nos apoyaron toda la noche. Gustavo y su equipo se fueron ya de madrugada, Federico también estuvo hasta muy tarde.

[drluisvargas]

El winch de Carlos dejó de funcionar, el carro de Camacho se pasó al frente y durante las horas siguientes el winch de 12,000 libras arrastró a los dos carros. Por la potencia del winch, se bajaba la batería y teníamos que parar para que se cargara. Esto hizo aún más lento el avance

[drluisvargas]

Avanzábamos casi sin luz para conservar la batería. Mi winch comenzó a dar problemas, ya no se podía quitar el cluth. Tenía que liberar y cobrar con el motor del carro encendido; esto consumía más gasolina y antes de que amaneciera se me terminó, el carro comenzó a toser y quedó frito, en una zanja y muy ladeado. Ni para dormir en esa posición.

[drluisvargas]

Al fín amaneció, cansados al extremo ya caminábamos como zombies. Cualquier lugar era bueno para medio dormir unos minutos. Ya veíamos la salida, como a 400 metros, pero ese tramo todavía representó varias horas de trabajo. Como a las dos de la tarde tuve que abandonar el Cid , tenía enfermos esperando desde hacía varias horas y me fuí a trabajar. LLegaron al rescate Federico, Edgar y Cuauhtémoc, pero esa es otra historia, de la cual ya no tengo fotos.

[drluisvargas]

Camacho salió a las dos de la tarde. Vélez también salió como a esa hora, tomó un atajo para llegar a su remolque y se topó con otra megaruta, no explorada, de donde ya no pudo salir, hasta ser rescatado al otro día. Salió hacia Puebla el viernes por la noche